La espera se inició en 1987, año en el que Lotus obtuvo su anterior victoria con el brasileño Ayrton Senna, quien en esa oportunidad ganaba para los de Enstone el Gran Premio del Este de los Estados Unidos, el cual también lo colocaba como líder del campeonato.
Aunque Räikkönen ya no lucha por el campeonato, para muchos ha sido difícil no recordar en Yas Marina, el triunfo del ahora desaparecido Senna, pues hace mucho que no se veía un piloto de Lotus en el cajón más alto del podio.
"Estoy muy contento por el equipo y también por mí. Nunca sabes lo que va a pasar durante la carrera; los coches de seguridad la complicaron un poco, pero ya hemos tenido carreras similares muchas, muchas veces este año. Hoy tuvimos pista libre para poder emplear nuestra velocidad. Quizás no fuimos los más rápidos al final, pero fuimos lo suficientemente rápidos y consistentes como para ganar, así que es genial para el equipo. Habíamos tenido algunas carreras complicadas en la segunda mitad de la temporada, así que es fantástico regresar con una victoria". Mencionaba Räikkönen tras lo conseguido el domingo.
Asimismo, su compañero de equipo Romain Grosjean se mostró muy contento con su triunfo, a pesar de tener que ver ese intenso final desde el garaje, pues tuvo que abandonar la carrera en la vuelta 37 por un desafortunado accidente múltiple en el que se involucraron varios pilotos.
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