A menos de un mes de la largada, fue en Lima que se organizó la primera presentación sudamericana de esta mini tournée. Etienne Lavigne pudo juzgar el grado de motivación de los pilotos peruanos, cuya cantidad se triplicó desde el año pasado. Exceptuando todo el apoyo y aliento del director del Dakar, toda la delegación (26 vehículos) recibió la bendición de las autoridades, ya que los miembros del gobierno presentes en la ceremonia, bautizaron oficialmente a su equipo “Fuerza Inca”. Algunos de los presentes: el Ministro de Medio Ambiente, Manuel Pulgar Vidal, el Ministro de Cultura, Luis Alberto Peirano, el Ministro de Turismo, José Luis Silva y el Ministro del Interior, Wilfredo Pedraza.
Al día siguiente los competidores y medios chilenos pudieron asistir a una solemne toma de mando frente al Palacio de la Moneda, que será el último objetivo de la expedición en las próximas semanas. Entre ellos, el motorista Francisco “Chaleco” López tiene el rol de abanderado y representa la mejor esperanza del país para conquistar el título. Esto satisfacerá al Presidente de la República, Sebastián Piñeira, fotografiado desde ya “para las fotos” con el trofeo tan deseado, en compañía de todos los pilotos, entre los cuales Boris Garafulic, que en la pista tendrá el mismo Mini X-Raid que Stéphane Peterhansel para intentar entrar en el Top 10… como mínimo.
Este año el rally no pasará por Buenos Aires pero la capital argentina sigue siendo el lugar ideal de reunión para organizar un encuentro entre los medios y los competidores del país. Fiel en la cita, el Ministro de turismo Enrique Meyer pudo alegrarse con la importante delegación argentina: 53 pilotos inscriptos. Entre ellos, Marcos Patronelli, ganador en el 2010, será el favorito para suceder en el palmarés de cuadriciclos a su hermano Alejandro, ausente este año. En autos, Lucio Alvarez, 5° en la última edición, atrae ahora el interés de todos los pronosticadores.
Fuente: Prensa Dakar 2013
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